Diferentes estudios siguen confirmando el cambio en la preferencias que han experimentado los compradores de vivienda a raíz de la pandemia. Ahora es el Observatorio de la Vivienda en España de Vía Célere el que destaca que, si bien antes la ubicación y el precio eran las variables determinantes, actualmente lo que más se valora es que el inmueble cuente con jardín o terraza. De acuerdo con el estudio de la promotora inmobiliaria, aunque la mayoría de los compradores han variado sus preferencias de compra, es en los jóvenes donde más esta presente este cambio. Así, el 64% de las personas entre 25 y 34 años afirma haber modificado sus premisas a la hora de buscar casa. Esta tendencia se replica en todos los segmentos poblacionales, aunque desciende a medida que se incrementa la edad: el 57% entre los de 35 y 44 años, un 52% entre los de 45 y 54 años años y un 49% entre los mayores de 55 años. La búsqueda de viviendas con terraza o jardín es la nueva prioridad de todos los compradores. Ahora, el 48% de los menores de 25 años (frente al 32% anterior) busca un hogar con este espacio exterior. Ocurre lo mismo con los compradores de 25 a 34 años (el 58% de ellos dan prioridad a estos espacios frente al 35% de antes); de 35 a 44 años (pasan del 44% al 61%), de 45 a 54 años (pasan del 39% al 51%) y los mayores de 55 años (pasan del 39% al 57%). Por el contrario, el interés por las variables tradicionalmente más relevantes, como la ubicación y el precio, descienden de forma significativa entre todos los compradores de vivienda. El tamaño de las habitaciones es otro de los elementos que ha ganado importancia en los últimos meses entre los menores de 25 años, pasando del 25% al 39% (apenas hay cambios o incluso existen ligeros descensos en el resto de las franjas de edad). También son más valoradas las zonas comunes, cuyo porcentaje aumenta en todos los segmentos, y la eficiencia energética, que crece especialmente en la población entre los 25 y los 34 años (pasando del 11% al 19%). Las mujeres han cambiado más sus criterios de búsqueda La encuesta también deja claro que las mujeres han cambiado más sus preferencias a la hora de buscar casa que los hombres (57% frente a 51%). Contar con terraza es una prioridad tras el confinamiento para el 63% de las mujeres frente al 43% anterior. En el caso de los hombres, este porcentaje ha pasado del 35% al 49%. El precio, sin embargo, pierde importancia como factor de compra de forma similar entre ambos: pasa del 59% al 48% en las mujeres y del 60% al 51% en los hombres. Ocurre lo mismo con la ubicación, que cae del 48% al 37% en las mujeres y del 52% al 42% en los hombres. Las zonas comunes es otro de los elementos más valorados ahora por las mujeres, cuya importancia ha pasado de un 14% a un 20% tras el encierro. En los hombres este crecimiento es menor, pasa del 16% al 19%. Las familias con niños priorizan las zonas comunes Los hogares con niños son los que más han cambiado sus preferencias a la hora de decidir cuáles son los elementos más importantes de la vivienda. Un 59% de estas familias reconocen este cambio, mientras que en las familias sin hijos este porcentaje es algo menor (51%). En este caso, la tendencia es similar a las anteriores, con un incremento considerable de la importancia del jardín o la terraza: sube del 43% al 56% en las familias con hijos y del 36% al 56% en los hogares que no cuentan con ellos. La existencia de zonas comunes es también mucho más valorada actualmente. En las familias con hijos la importancia de este requisito ha crecido del 18% al 27%, mientras que en los hogares sin niños ha subido del 13% al 15%. Cambios también en las zonas preferidas para vivir Finalmente, las zonas preferidas para vivir también han experimentado diferencias significativas. La edad también juega un papel importante. Un 55% de los jóvenes menores de 24 años prefiere vivir en barrios o zonas periféricas de las ciudades. Este porcentaje se reduce en los grupos de mayor edad: 40% en los ciudadanos de entre 24 y 34 años; 35% entre los que tienen de 35 a 44 años; 29% entre los de 45 a 54 años; y solo el 22% en los mayores de 55 años. Sin embargo, son los ciudadanos de mayor edad los que también más se plantean vivir en un pueblo o una ciudad secundaria fuera de un gran núcleo urbano. En concreto, un 41% de los mayores de 55 años apostarían por esa opción, frente a solo un 20% de los menores de 24 años. Los mayores de 55 años son también los que más apuestan por vivir en el centro de la ciudad (25%), seguidos por el grupo de 25 a 34 años (21%). Por último, también se han producido cambios en las zonas preferidas para vivir entre las familias con hijos y sin hijos. Los barrios periféricos de las grandes ciudades son las favoritas de las familias con hijos (34% frente al 30% de las familias constituidas únicamente por adultos). Este grupo apuesta más por las ciudades más pequeñas y los pueblos (36% frente al 30% de los primeros).