Por qué se aplica el IRPF a las pensiones La pensión de jubilación tiene retenciones del IRPF porque se considera una renta del trabajo. Por ello, la Seguridad Social hace una retención del IRPF en las pensiones, como un adelanto de lo que se tiene que declarar anualmente al hacer la declaración de la renta. Esta retención es distinta según la cuantía de la pensión y determina la pensión neta que recibe el pensionista. El porcentaje de retención media de la pensión de jubilación es del 7%, mientras que la pensión media es de 15.085 euros anuales, pero cuanto más alta es la pensión mayor es la retención. Así, hay pensiones en las que solo se retiene un 1%, mientras que en otras se aplica la retención máxima que está en torno al 15%. Además, existen pensiones que están exentas de retención del IRPF. Tramos retención del IRPF en las pensiones en 2022 Para determinar el IRPF de una pensión de jubilación hay que tener en cuenta la base anual de la pensión. En función de la cantidad de dinero que cobre el pensionista se aplica un porcentaje distinto. El porcentaje retenido aumenta conforme aumentan los ingresos. Los tramos de ingresos para el cálculo de las retenciones en 2022 son los siguientes: TRAMOS INGRESOS RETENCIÓN Menos de 12.000 euros <1% De 12.001 a 18.000 euros 2,61% De 18.001 a 24.000 euros 8,89% De 24.001 a 30.000 euros 11,83% Más de 30.000 euros 15,59% Pensiones exentas de pagar impuestos Al margen de la cuantía, hay algunas pensiones que están exentas de pagar impuestos porque no se consideran como rendimientos del trabajo. En este grupo de pensiones están: Pensiones derivadas de actos de terrorismo, incluidas las pensiones de viudedad provocadas por actos de terrorismo. Pensiones para quienes sufrieron lesiones o mutilaciones a causa de la Guerra Civil. Pensiones por invalidez absoluta o incapacidad permanente. Esto se aplica a las pensiones de la Seguridad Social y a pensiones privadas que se cobren por estas circunstancias. Pensiones de orfandad. ¿Cuándo tienen que hacer declaración de la renta los pensionistas? Los pensionistas no están obligados a hacer declaración de la renta si cobran menos de 22.000 euros al año. Aunque esta cantidad se reduce a 14.000 euros cuando se tienen dos pagadores y se cobra más de 1.500 euros al año del segundo pagador. Esta circunstancia hay que tenerla en cuenta, sobre todo, cuando se cobra un plan de pensiones como complemento de la pensión pública. Sin embargo, los pensionistas que cobran la pensión mínima de jubilación no tienen que realizar la declaración de la renta, porque sus ingresos están por debajo de los límites marcados por Hacienda que son de 12.450 euros anuales. Para saber si un pensionista tiene que presentar la declaración del IRPF, además de la retención según los tramos de ingresos, hay que tener en cuenta sus circunstancias personales y familiares. Dentro de estas circunstancias se incluye la edad, si es mayor de 65 o de 75 años, si tiene algún grado de discapacidad o tiene derecho a alguna deducción por su situación familiar. De hecho, la retención no significa que el pensionista tenga que pagar al hacer la declaración de la renta, porque puede salir a devolver. ¿Cómo se puede calcular la retención del IRPF en la pensión? La Agencia Tributaria dispone de una herramienta para que los pensionistas pueden calcular cuál es la retención que se aplica según la pensión y sus circunstancias familiares. En este enlace puedes acceder a la web de la Agencia Tributaria y comprobar en el simulador si la retención de la pensión es correcta o no. En caso de que se esté practicando una retención que no te corresponde se puede reclamar.