Tal y como te contábamos el otro día en nuestro análisis sobre el precio de la vivienda en 2021, el mercado inmobiliario está mostrando en términos generales signos de recuperación y espera, más pronto que tarde, recuperar las cifras anteriores al estallido de la pandemia. Sobre todo en el caso de la obra nueva, que en los últimos meses ha mostrado una mayor fortaleza que la vivienda usada: los precios de la vivienda nueva apenas se han resentido y en febrero de 2021 se ha registrado un número récord de compraventas (10.130) que no se producía desde desde el verano de 2014. Este comportamiento desigual también se ha producido en las diferentes comunidades autónomas y provincias. De este modo, hay algunas que están mejor posicionadas que otras para lograr su recuperación total. La provincia de Málaga es una de ellas. De acuerdo con el análisis realizado por Tinsa, “Málaga y la Costa del Sol se postulan como mercados inmobiliarios que experimentarán una rápida recuperación en cuanto se normalice la situación sanitaria”. La plataforma independiente de valoración y gestión digital de datos inmobiliarios considera que la provincia andaluza reúne numerosos atractivos que favorecen su rápida recuperación y la convierten en “un foco de nuevos proyectos a medio y largo plazo y de atracción para el inversor nacional e internacional”: el actual escenario general de estabilización, el dinamismo de la vivienda en la zona y la evolución positiva de la obra nueva en la provincia de Málaga. Tras el parón inicial, cinco provincias andaluzas reflejan variaciones positivas tras un año de crisis del Covid-19: Sevilla (2,3%), Huelva (1,2%), Málaga (0,3%), Granada (0,2%) y Córdoba (0,1%). Por otro lado, Málaga es, además, la capital andaluza que mayor incremento ha experimentado en tasa interanual durante el primer trimestre de 2021 (5,1%), según la estadística IMIE Mercados Locales de Tinsa. Málaga, especialmente atractiva para el comprador internacional En su análisis, la empresa de valoración añade que la provincia malagueña es un destino especialmente atractivo para el comprador internacional por su ubicación privilegiada, buen clima y calidad de vida. Es verdad que las limitaciones y restricciones de movilidad impuestas por el Covid-19 han reducido el número de inversiones foráneas en la costa española, pero también es cierto que “muchas han sido pospuestas a la espera de la apertura de las fronteras y la reactivación de los vuelos, y que los ritmos de actividad se recuperan poco a poco”. De hecho, y según apunta el estudio, pese a esta ralentización del mercado, la actividad no ha cesado en la provincia andaluza. Málaga fue la más dinámica en construcción de obra nueva durante 2020: registró 6,2 visados por cada 1.000 viviendas existentes, casi el doble que la media nacional (3,3). Entre los proyectos estrella de obra nueva en Málaga capital se encuentran, entre otros, Málaga Towers, los tres edificios que dibujarán un nuevo skyline en la ciudad; las dos nuevas torres que se levantarán en los terrenos de la antigua central térmica de los años 60; los dos rascacielos Torres Martiricos, en el distrito Palma-Palmilla; y las Torres Repsol, proyecto que incluye la construcción de cuatro grandes torres y cuatro bloques VPO. En cuanto al mercado en el conjunto de la Costa del Sol, Tinsa añade que “evoluciona más lento que en la capital, pero se encuentra activo pese a la incertidumbre imperante. Sus excelentes condiciones climáticas, ubicación y calidad de vida le convierten en un destino compatible con el auge del teletrabajo para el comprador nacional, que busca terraza y jardines, y para el inversor extranjero como destino para una segunda residencia”. La obra nueva se mantiene y la de segunda mano baja Analizando la evolución de los precios en la ciudad de Málaga durante los últimos meses, la plataforma corrobora el diferente comportamiento de la vivienda nueva y la de segunda mano. Mientras que la primera se ha caracterizado en términos generales por la estabilidad, la usada sí ha experimentado mayores variaciones de precio: se ha mantenido elevado en el centro histórico, mientras que fuera de ella ha bajado aproximadamente un 5%. En la periferia, las caídas de valor han alcanzado hasta el 10%. A modo de conclusión, Tinsa añade que “dado el componente de inversión y de presencia extranjera en el mercado residencial malagueño, especialmente en la costa, lo previsible es que en cuanto se recupere el tránsito interregional y, sobre todo, internacional, la actividad experimente una recuperación más rápida que en otros mercados”.