Una casa modular es un tipo de vivienda prefabricada que se caracteriza por construirse a partir de módulos que han sido creados en una fábrica. Una vez fabricados, estos módulos son trasladados a un terreno donde se ensamblan para crear la casa. Las casas modulares no son exactamente igual que las casas prefabricadas. Puede decirse que todas las casas modulares pueden incluirse entre las prefabricadas, pero no al revés. Todas se construyen de forma industrializada en una factoría, pero las modulares se crean siempre a partir de unos módulos, mientras que muchas prefabricadas se construyen en una o varias piezas que más tarde se unen y/o instalan sobre una parcela. Es el caso, por ejemplo, de los bungalows de los campings o de las casas prefabricadas móviles. En realidad, la casa modular es fruto del desarrollo y evolución de las primeras viviendas prefabricadas, que eran pequeñas y se caracterizaban por su precio reducido y porque se podían instalar rápidamente. Foto: Jordygraph/Depositphotos Sin embargo, con el paso de los años se apostó por la fabricación industrializada a partir de secciones o módulos, ya que este proceso permitía aumentar la producción y reducir costes. Esto facilitó construir viviendas más grandes y adaptables a los gustos del consumidor, que podían ampliarse posteriormente. Actualmente, las casas modulares representan un concepto más próximo a lo que se entiende como construcción industrializada, ya que sus paneles se construyen en la fábrica para ser posteriormente ensamblados sobre la parcela. Junto al ahorro de costes y optimización del trabajo (no importan las inclemencias meteorológicas, etc.), esta industrialización hace que estas casas se finalicen mucho más rápidamente (en solo unos meses) que una casa de obra (alrededor de dos años). La casa modular se diferencia del resto de prefabricadas por su mayor flexibilidad tanto a la hora de construirse (viviendas de mayor o menor tamaño, con instalaciones y acabados más lujosos, etc.) como de personalizarse y ampliarse posteriormente y una estética más parecida a las casas construidas de forma tradicional. Las casas prefabricadas modulares son viviendas más económicas y rápidas de construir que una vivienda de obra tradicional y ofrecen muchas opciones de personalización Existen diferentes tipos de casas modulares según el material con el que están fabricadas: madera, hormigón o acero. En nuestro catálogo puedes encontrar un sinfín de posibilidades, que van desde viviendas funcionales a precios muy ajustados a otras mucho más grandes y singulares. Madera Las casas modulares de madera son una de las opciones más económicas para aquellos que buscan una vivienda prefabricada. Asimismo, son una excelente elección si quieres crear tu hogar en el campo o la montaña, ya que sus materiales y apariencia se integran muy bien en entornos naturales. Foto: Madereco Su principal ventaja es la calidez y eficiencia de la madera, ya que se trata de un material natural, totalmente sostenible y renovable que con el mantenimiento adecuado puede durar muchos años (en este otro artículo te contamos cuánto duran las casas prefabricadas). Este tipo de viviendas destaca por su aislamiento térmico y acústico, un aspecto a tener muy en cuenta ya que aporta una gran sensación de tranquilidad y confort a sus ocupantes. La madera es un material más económico y sostenible, pero precisa mantenimiento. Si hablamos de presupuesto, de entrada la madera es un material más económico que el acero o el hormigón, aunque también hay modelos de casa modular de madera con precios elevados, según el tamaño o los acabados. En nuestro catálogo puedes encontrar casas modulares construidas en este material a partir de 20.000 euros (45 metros cuadrados, una habitación y un baño). Hormigón Las casas modulares de hormigón ofrecen un estilo de vivienda más moderno, basado en grandes estructuras rectangulares que pueden adaptarse a diferentes tamaños y presupuestos. Foto: Mojuru Modular Buildings El hormigón aporta una gran resistencia a los insectos, al fuego y a los impactos externos (grietas). Por lo tanto, las casas modulares de hormigón son más resistentes al paso del tiempo (tienen una vida media de 60 años) y demandan menos mantenimiento. En este sentido, son muy parecidas a una vivienda de construcción tradicional. Otros aspectos interesantes de este material es su capacidad de aislamiento, tanto térmico como acústico, que permite un ahorro energético. En cuanto a sus ventajas constructivas, los módulos de hormigón son muy resistentes y evitan la necesidad de muros interiores, por lo que se pueden construir viviendas con grandes espacios interiores. Acero En las casas modulares de acero, los módulos están hecho de acero galvanizado. Entre las ventajas de estas casas se cuentan su elevada resistencia, su durabilidad, su ductilidad, que le permite soportar grandes deformaciones como podrían ser los terremotos, y su tenacidad, que es la capacidad de absorber grandes impactos sin que sufra la estructura. Foto: Tekdom Una casa modular de acero es rápida de instalar, porque los paneles de acero son ligeros y fáciles de transportar, lo que permite un precio mucho menor que el de una vivienda tradicional. Además, el acero ofrece un gran aislamiento acústico y térmico, algo que fomenta la eficiencia energética de estas edificaciones. Por último, el acero tiene mil vidas, pues es reciclable un número infinito de veces. Asimismo, es un material fácil de trabajar con un mantenimiento muy sencillo, por lo que permite que se diseñen modelos de viviendas con más posibilidades estéticas. Híbridas Existen también las casas modulares híbridas, en las que se emplean distintos materiales. Por ejemplo, es habitual utilizar estructuras auxiliares de acero en una casa modular de madera y de hormigón como refuerzo y sujeción de los elementos. También se combina el uso de distintos materiales en el interior y el exterior de las casas modulares. Así, se puede utilizar hormigón para los suelos y techos de las casas de acero o madera en los suelos de las casas de hormigón. Precios de las casas modulares El precio de una casa modular depende de su tamaño, el material empleado y los acabados. Para que puedas valorar el ahorro que supone una casa modular con respecto a una de construcción tradicional, se estima que las primeras son entre un 20% y un 30% más baratas. En términos generales, los precios de una casa prefabricada modular van desde 20.000 hasta 340.000 euros En nuestro catálogo puedes hacerte una idea de los precios de las viviendas estándar a la venta en España. En madera puedes encontrar casas a partir de 20.000 euros y con una superficie de unos 45-50 metros cuadrados. En cuanto al tamaño y coste máximo, dependen de tus necesidades y presupuesto. En el mercado hay casas modulares de más de 400 metros cuadrados, equipadas con todo tipo de lujos y con precios desorbitados. En relación a los modelos que puedes encontrar en Housage, la horquilla alcanza los 340.000 euros para una casa modular de madera de 296 metros cuadrados y dos plantas o para casas modulares de hormigón de 250 metros cuadrados y dos pisos. No obstante, muchas casas modulares son construidas a medida del comprador, por lo que su precio final no está determinado. Para que te hagas una idea, el precio de una casa modular en estos casos puede estar entre los 1.000 y 1.500 euros/metro cuadrado según los materiales, acabados, etc.