¿Cuánto dinero necesitas para comprar una casa?

De poco sirve que ya tengas decidido el barrio en el que quieres vivir o incluso un piso concreto, si antes no te has planteado la siguiente pregunta: ¿cuánto dinero necesitas para comprar una casa? Sí, aunque seguramente ya lo sepas, los tiempos en los que los bancos aportaban hipotecas del 100% e incluso cubrían los gastos de compra de una vivienda nueva han pasado a mejor vida, por lo que ahora es un requisito imprescindible contar con unos ahorros importantes antes de lanzarte a la búsqueda de un nuevo hogar. Pero, ¿de qué cantidad estamos hablando?

El ahorro para los gastos de compra

A la hora de determinar cuánto dinero necesitas tener ahorrado para comprar una casa debes tener en cuenta dos grandes desembolsos. El primero, el relativo a los gastos generados por la adquisición de ese inmueble (tasación, notaría, registro, impuestos, contratación de hipoteca -si es necesaria-, etc.); y el segundo, el dinero que tendrás que poner de tu bolsillo para cubrir el coste total de la propiedad (recuerda que los bancos ya no conceden préstamos que cubran el 100% del valor de tasación).

Según apuntan numerosos expertos inmobiliarios, y teniendo en cuenta los gastos administrativos, fiscales y financieros destinados a la compra (sin contar el valor del piso), es recomendable disponer de un ahorro de entre el 10% y el 15% del precio de la vivienda. Así, si el piso al que hemos echado el ojo cuesta unos 200.000 euros (más o menos la media española), deberemos disponer de unos ahorros aproximados de 20.000 euros para cubrir solo los gastos correspondientes a su adquisición.

El ahorro que completa el préstamo bancario

Ya lo hemos comentado anteriormente: las hipotecas que cubrían el valor íntegro del piso son cosa del pasado. Ahora, lo normal es que los préstamos de las entidades bancarias cubran como mucho el 80% de su valor de tasación. Aquí está la segunda respuesta a la pregunta de hoy, ¿cuánto dinero necesitas para comprar una casa? En el caso de que precises de una hipoteca para cerrar la operación, al margen del dinero destinado a cubrir los gastos de compra mencionados anteriormente, deberás contar con el 20% restante del valor de tasación de la vivienda que cubra la cantidad no aportada por el préstamo hipotecario. En el caso del ejemplo anterior de la vivienda de 200.000 euros, deberás tener otros 40.000 euros adicionales.

Según los expertos inmobiliarios, las familias no deben destinar más del 30 o 35% de sus ingresos mensuales al pago de las cuotas hipotecarias.

Cómo ves son cantidades elevadas. Por eso, y como ya te contamos en nuestro reportaje sobre qué piso puedes comprar con tu sueldo, es muy importante que antes de lanzarte a la compra de un piso analices detenidamente tu situación personal y calcules muy bien qué cuota podrás pagar sin poner en peligro tu economía familiar. En este sentido, se recomienda que las familias destinen no más allá del 35% de sus ingresos familiares a pagar la cuota hipotecaria.

Este es el dinero que necesitas para comprar una casa

Tras analizar detalladamente los dos apartados anteriores, ya tenemos la respuesta a la pregunta que planteábamos al principio de este artículo. En términos generales, podemos decir que para comprar una casa nueva es necesario que previamente tengas ahorrado, como mínimo, alrededor de un 35% de su valor. El primer 10-15% irá destinado a cubrir todos los gastos relacionados con la adquisición, mientras que el 20% restante servirá para completar el dinero no aportado por la hipoteca.

No te pierdas: ¿Cuáles son los gastos fijos de una casa?

¿Por qué decimos que como mínimo? Muy sencillo. No olvides que la compra de una vivienda es mucho más que disponer del inmueble. Inmediatamente después de su adquisición deberás hacer frente a otros gastos adicionales destinados a amueblarla, hacer la mudanza, etc. Por este motivo, es recomendable que tus presupuestos sean siempre conservadores y dejen margen de maniobra para gastos imprevistos. Ah, y como te contábamos unas líneas más arriba, asegúrate de que la cuota hipotecaria resultante no se coma un porcentaje excesivo de tus rentas mensuales.