Cuando acabas de estrenar hogar, una de las primeras cosas que debes realizar es dar de alta los suministros en el piso nuevo para poder vivir en él. Lo primero que debes tener en cuenta para dar el alta de suministros en una vivienda nueva es que necesitarás tener la cédula de habitabilidad, el documento que acredita que ese inmueble reúne todas las condiciones de habitabilidad que exige la ley. Por otro lado, no es lo mismo dar de alta los suministros en un piso de obra nueva que en uno usado, ya que hay que contratar el servicio por primera vez. Los suministros básicos que tienes que contratar son la luz, el gas y el agua. En las siguientes líneas vamos a contarte cómo hacerlo y cuánto vale dar de alta los suministros. Pasos para dar de alta el suministro eléctrico A la hora de dar de alta el suministro eléctrico hay que diferenciar, por un lado, la distribuidora o compañía que suministra la energía hasta la casa y por otro la comercializadora, que es la empresa con la que se contrata la luz y que cobra las facturas. El alta de luz se tramita a través de la comercializadora y puedes elegir la que quieras. Para dar de alta el suministro eléctrico de tu casa nueva necesitas disponer del Certificado de Instalación Eléctrica o boletín eléctrico (CIE) emitido por un instalador electricista autorizado, que certifica que la instalación cumple todos los requisitos. Cuando se trata de un piso nuevo, el encargado de tramitarlo es la promotora. Este certificado tiene una vigencia de 20 años. El Código Universal de Punto de Suministro (CUPS) es asignado por la distribuidora para identificar el contador. Se trata de un código permanente que no varía aunque cambie el titular o la compañía. El siguiente punto importante es elegir la potencia eléctrica que quieres contratar. Cómo calcular la potencia eléctrica que necesita una vivienda nueva Calcular la potencia eléctrica que necesitas en tu casa es el primer paso que debes realizar al dar de alta el suministro eléctrico. Debes decidir cuánta potencia necesitas para que funcionen los aparatos eléctricos de forma simultánea sin que salte el Interruptor de Control de Potencia (ICP) y se corte la luz. Existen unas potencias eléctricas normalizadas (1,15 kw, 1,725 kw, 2,3 kw, 3,45 kw, 4,6 kw…), pero también se pueden contratar otras añadiendo múltiplos de 0,1 kW a ellas (sin superar nunca los 15 kw). La potencia eléctrica influye en el precio de alta del servicio y de las facturas mensuales, pero debes tener en cuenta que si contratas menos potencia de la necesaria sufrirás continuos cortes de luz. Para calcular la potencia eléctrica que necesitas en tu casa existen en Internet calculadoras que lo determinan en función del tamaño del inmueble, los electrodomésticos, las luces y el número de ocupantes. ¿Cuánto cuesta dar de alta la luz? ¿Y cuánto vale dar de alta los suministros? En el caso de la luz, darla de alta está regulado en el RD 1995/2000 en cuanto a los derechos regulados, que son iguales en todo el territorio independientemente de la comercializadora. Estos derechos se pagan cuando se solicita la activación de un suministro, se pide un aumento de la potencia o después de haber estado inactiva la línea. Los derechos de extensión se pagan por utilizar la infraestructura de la compañía distribuidora; los derechos de acceso al contratar un nuevo suministro o subir la potencia; y los derechos de enganche cuando se conecta la instalación a la red de suministro. El precio final depende de la potencia contratada, pero puede suele rondar entre los 130 y 200 euros. Este coste se abona en la primera factura emitida desde la activación del punto de suministro. ¿Qué tarifa se puede contratar en una vivienda nueva? Una vez decidida la potencia hay que ver la tarifa que interesa según los hábitos de consumo, ya que se pueden contratar diferentes tipos: tarifa plana, discriminación horaria o fija. En la tarifa fija, el precio del kilovatio hora es igual a todas las horas, mientras que en las tarifas con discriminación horaria cambia el precio del kw según los tramos del día. Generalmente, la luz es más barata por la noche y más cara durante el día. La discriminación horaria es aconsejable cuando concentras un 30% del consumo en las horas nocturnas. En la tarifa plana se paga lo mismo todos los meses independientemente del consumo que tengas y a final de año se regula en la última factura: si ha habido más consumo se emite una factura más alta para compensar. También debes elegir entre la tarifa regulada Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC), que está regulada por el Gobierno para los clientes que no tenga contratada una potencia superior a los 10 kW, o contratar una comercializadora eléctrica del mercado libre. Cómo dar de alta el suministro de gas El siguiente paso a la hora de dar de alta los suministros en un piso nuevo es el gas. Cuando se trata de una vivienda nueva que ya tiene hecha la instalación, para tramitar el alta del suministro del gas necesitas disponer del código CUPS (Código Universal del punto de suministro) que es único para cada instalación. Con este código se puede contactar con una comercializadora para contratar el gas. La información que se necesita para dar de alta el gas es la siguiente: datos del titular del contrato, dirección de la vivienda, CUPS, copia de la escritura de propiedad de la vivienda, certificado de instalación receptora individual (IRI), licencia de primera ocupación y certificado de instalación térmica para la calefacción. Para dar de alta los suministros en una vivienda nueva, la promotora es la que se entrega toda la documentación necesaria. ¿Cuánto cuesta dar de alta el suministro de gas? El coste de dar de alta el suministro de gas comprende los derechos de alta, que varían según la comunidad autónoma, y la tarifa de acceso. La tarifa del gas depende del consumo: la mínima es la tarifa 3.1 para menos de 5.000 kwh al año para viviendas que solo utilizan gas para el agua caliente y la cocina; la 3.2, de entre 5.000 kwh y 50.000 kwh año, que comprende también la calefacción de gas (la más habitual en las hogares); y las tarifas 3.3 y 3.4 para negocios. En cuanto a los derechos de acometida que se pagan por nuevo suministro, el importe es el mismo en toda España (128 €). En la primera alta del gas, esta tarifa de acceso la asigna el instalador según el equipamiento y el tamaño de la vivienda. Más tarde, la distribuidora valora cada año el consumo de gas para reasignar la tarifa más apropiada. ¿Qué tarifa de gas se puede contratar? Existe la tarifa de último recurso (TUR) fijada por el Gobierno. Está dentro del mercado regulado y solo se puede contratar en comercializadoras de último recurso. Si se contrata en el mercado libre, cada comercializadora establece los precios y descuentos que quiera. Las tarifas 3.1 y 3.2 existen en el mercado libre y regulado, mientras que las 3.3 y 3.4 solo están en el libre. Finalmente, ten en cuenta que algunas comercializadoras ofrecen tarifas conjuntas de luz y gas con bonificaciones y descuentos. Debes analizar las ofertas para saber cuál se ajusta más al consumo de tu hogar. Dar de alta el suministro de agua El agua es el último elemento elemento que faltaba a la hora de dar de alta los suministros. Para dar de alta el suministro de agua en un piso nuevo es necesario acudir a la compañía suministradora que existe en cada comunidad para solicitarlo. Los requisitos de alta son también diferentes, pero generalmente incluyen la solicitud de la licencia de ocupación, la cédula de habitabilidad o la escritura de la casa. En cuanto al coste, también es distinto en cada ayuntamiento, aunque suele moverse en una horquilla de entre 50 y 150 euros. Como has podido leer en este artículo, en el mercado existen diferentes formas de dar de alta los suministros. Como recomendación general, lo más importante es que analices todas las ofertas disponibles antes de decidir la compañía con la que contratarás el servicio, aunque podrás cambiar de proveedor más adelante sin problema.