Cuando los días empiezan a acortarse y la temperatura comienza a bajar unos grados significa que el otoño se acerca. Estas primeras señales de que comienza el frío nos ponen en alerta de la necesidad de preparar la casa para hacerla más confortable en esta estación. ¿Qué puedes hacer en casa ante la llegada del otoño? En primer lugar, debes empezar por cambiar los textiles del hogar, preparar los radiadores y reacondicionar la casa para el cambio de estación. No obstante, hay otras cosas que puedes hacer para disfrutar del otoño al máximo en tu casa. Te las contamos. Deja fuera de casa el frío La mejor forma de evitar que el frio se cuele en casa cuando empieza el otoño es poniendo una barrera a su entrada a través de las ventanas. ¿Cómo puedes conseguirlo? Muy fácil, colocando burletes en las ventanas para que cierren herméticamente y no haya filtraciones. No te pierdas: Cinco razones por las que comprarte una casa nueva en otoño es una buena idea Hay burletes para todo tipo de ventanas: abatibles, oscilantes, oscilobatientes, correderas… Solo tienes que escoger el que se adapte a tus ventanas para que el aislamiento sea eficaz. Pon a punto la calefacción Antes de que el frío llegue tienes que repasar la caldera y la calefacción, porque después de estar inactiva durante los meses de verano es preciso hacer una puesta a punto. Es muy sencillo, tan solo hay que purgar los radiadores para sacar el aire que ha quedado en las tuberías: para hacerlo tienes que abrir la llave de cada radiador hasta que salgan las primeras gotas de agua. Así conseguirás que los radiadores se calienten rápidamente al encender la caldera. En cuanto a la caldera, es conveniente hacer una limpieza anual por parte de personal técnico especializado. Mantas y plaids para el sofá Las noches de calor sofocante son solo un recuerdo con la llegada del otoño. Si no quieres quedarte helado por la noche o en la madrugada, es el momento de sustituir las colchas de verano por los edredones. Los textiles de hogar tienen su estacionalidad y ahora es la época de las mantas y los plaids para el sofá y los edredones en la cama. Y ten a punto las fundas nórdicas, porque en cuanto bajen un poco más las temperaturas por la noche tendrás que recurrir a ellas. Cortinas gruesas o térmicas para aislar La segunda barrera al frio que entra por las ventanas se puede conseguir con las cortinas. Es buena idea sustituir los ligeros visillos del verano por cortinas preparadas para aislar el frío. Pueden ser cortinas aislantes de telas gruesas y tonos claros, que dan una mayor luminosidad durante las horas de luz, pero al ser gruesas evitan que pase el frío. Alfombras para cubrir el suelo Caminar descalzo por casa deja de ser placentero en el otoño, porque el frio del suelo se cuela hasta los huesos. Hay que cubrir los suelos con las alfombras que han estado guardadas todo el verano para aislar los pies del frio del suelo y dar calidez a la casa. La elección del tipo de alfombra dependerá mucho de la decoración del salón o de las habitaciones, que son las estancias donde se ponen las alfombras. No obstante, las de lana son, sin duda, las más calientes. Las terrazas también son para el otoño A pesar de que las terrazas se asocian con el verano y que este año han adquirido un gran protagonismo por el confinamiento, (aquí puedes ver cuáles son las zonas preferidas de la casa para pasar el confinamiento), son un espacio que también puede aprovecharse en otoño. Sí, verano es el momento óptimo para sacar el máximo provecho a tu terraza, pero en otoño son ideales para aprovechar los días de sol. Eso sí, debes acondicionar el espacio, tener a mano mantas y cojines para resguardarte del frio y una iluminación adecuada para cuando se pone el sol. Decora con plantas de temporada En el otoño se produce la caída de las hojas de los árboles y parece que las plantas se paralizan hasta la primavera, sin embargo existen plantas que florecen en esta estación. Puedes elegir entre la rosa de pitiminí, la violeta africana, la prímula o el ciclamen, que son idóneas para decorar las casas en otoño porque necesitan mucha luz y poco riego. Sobre todo, evita el frio y la humedad ambiental para conseguir que las flores se mantengan toda la temporada. Y, un último consejo de lo que tienes que hacer en la casa con la llegada del otoño: el cambio de temporada en el armario. En realidad, más que la casa eres tú quien se prepara para la nueva estación guardando la ropa y calzado de verano (vestidos, pantalones cortos, bañadores, sandalias y chanclas) y sacando los jerséis, chaquetas, abrigos y chubasqueros necesarios para combatir el frio de esta estación. Aunque todavía quedan algunos días de calor, el otoño ya ha llegado...