Puesto que nos encontramos en una época con el precio de la electricidad batiendo récords históricos en España y con el firme objetivo de hacer nuestros hogares más eficientes, en este artículo mostraremos cuáles son los electrodomésticos que más electricidad consumen y cuánto cuestan. Acompañamos el listado con consejos sobre cómo ahorrar dinero haciendo pequeños cambios en su consumo de energía. Adicionalmente, hemos incluido otro listado con aquellos electrodomésticos que menos energía consumen de nuestro hogar. Listado de los electrodomésticos que más consumen Caldera La caldera es uno de los aparatos que más energía consumen en una vivienda, siendo responsable de hasta el 30% del consumo total de electricidad. Al haberse comenzado a fabricar con materiales más eficientes que antes y gracias a normativas como la Directiva Europea de Eficiencia Energética (ErP), su consumo disminuye cada año, pero hay que seguir trabajando para lograr que este electrodoméstico genere un gasto más razonable. Para ahorrar en la caldera, es importante asegurarse de que el termostato está correctamente ajustado y no supera los 20 grados, y limpiar regularmente los filtros. Caldera eléctrica Lavadora El uso de la lavadora es otra de las principales fuentes de consumo energético en un hogar. Dependiendo de su tamaño, puede consumir hasta 400 kWh al año. La mejor manera de reducir este consumo es cargar correctamente la máquina y utilizar agua fría siempre que sea posible.Lavavajillas: Los lavavajillas son cada vez más populares ya que son una gran ayuda para ahorrar tiempo en las tareas domésticas. Sin embargo, su consumo de energía suele ser muy elevado, sobre todo si se trata de modelos antiguos y fabricados con materiales menos eficientes. Un lavavajillas medio consume unos 200 kWh al año y puede costar hasta 40 euros en la factura de la luz. Seleccionar a menudo los programas ECO del lavavajillas puede ayudarnos a lograr cierto ahorro de dinero a la hora de lavar nuestras vajillas. Estos programas utilizan un sistema de lavado optimizado para consumir una menor cantidad de energía y por tanto son también más ecológicos. Vitrocerámica Cocinar en la placa de cocción es una de las actividades más comunes en cualquier hogar, pero también es una gran fuente de consumo energético. Dependiendo de su tipo y potencia, las placas pueden utilizar de 400 a 900 kWh al año, lo que se refleja sin ninguna duda de forma notable en la factura de la luz (hasta 120€ al año). La mejor manera de ahorrar electricidad al cocinar es utilizar la placa de cocción adecuada para la tarea que se vaya a realizar. Por ejemplo, si está hirviendo agua o haciendo pasta, utilice una placa de baja potencia. Si está friendo algo o cocinando una comida grande, utilice una placa de alta potencia. También puede ahorrar energía utilizando tapas en las ollas para impedir que se desprenda el calor generado en su interior. Horno Al igual que la cocina de placas, los hornos tienen un importante nivel de consumo, especialmente si son viejos y utilizan más energía que los modelos más nuevos. El horno puede consumir entre 200 y 400 kWh al año, por lo que es mejor evitar su para pequeñas cantidades de comida y aprovechar cuando esté encendido para elaborar más platos. Apagar y encender el horno no es para nada recomendable puesto que estaremos malgastando energía y pagando de más. Calefacción Con la llegada del frío, la calefacción se convierte en una de nuestras necesidades básicas de confort. Sin embargo, esto también supone un consumo muy elevado, especialmente en regiones frías del norte de España. Para gastar menos en calefacción es aconsejable utilizar un termostato programable y mantener la temperatura a un nivel adecuado para nuestras necesidades. Aire acondicionado El uso del aire acondicionado es una de las principales causas de las elevadas facturas de electricidad en verano. Puede consumir hasta 1.200 kWh al año, por lo que es importante utilizarlo sólo cuando sea necesario e intentar mantener la temperatura a un nivel confortable a través de una correcta ventilación con apertura y cierre de ventanas en momentos adecuados. Por ejemplo, en las noches de verano es mejor bajar la temperatura, cerrando las ventanas y encendiendo el aire acondicionado. De este modo dormiremos mejor y nos levantaremos más descansados. Durante el día, el cierre de cortinas, estores e incluso ventanas para bloquear la entrada de sol y de aire caliente puede contribuir a un menor calentamiento del hogar y por tanto una menor necesidad posterior de encender el aparato de aire acondicionado. Aparato de aire acondicionado Calefactor Los calefactores eléctricos son una de las fuentes de calefacción más ineficientes debido a su baja eficiencia energética. Por ejemplo, si utiliza un calentador de 1000 vatios durante cuatro horas al día, consumirá unos 4000 kWh en un mes, lo que equivaldría a una factura mensual de unos 100 euros. Para ahorrar con el calefactor a la hora de la ducha, podemos plantearnos ducharnos en las horas centrales del día si es posible, cuando más alta es la temperatura. Iluminación La iluminación es otra de las principales fuentes de consumo eléctrico en nuestros hogares y puede representar hasta un 15% del total. La mejor manera de reducir este consumo es utilizar bombillas LED, que consumen hasta un 85% menos de energía que las bombillas incandescentes tradicionales. Ordenador Aunque los ordenadores no suponen un gran consumo de electricidad, es cierto que un ordenador de sobremesa consume por término medio unos 150 kWh al año, mientras que un portátil utiliza unos 65. Es importante utilizar el ordenador en modo de ahorro de energía y apagarlo cuando no vayamos a utilizarlo durante mucho tiempo. Equipo de música Un equipo de música consume una media de 100-120 W de energía cuando se enciende y puede consumir hasta 100 kWh al año. En este caso, es recomendable utilizar auriculares incluso en casa, lo cual sin duda agradecerán también tus vecinos. Kettle Hervir el agua con un hervidor, sin duda, el método más rápido para preparar té, pero también es uno de los que más energía consume. El consumo medio de este electrodoméstico puede ser de hasta 200 kWh al año y puede aumentar en 40 euros en la factura anual. Batidora La batidora es otro electrodoméstico que consume mucha energía para su reducido tamaño, especialmente si se utiliza con frecuencia. De hecho, su consumo energético anual puede llegar a ser de 150 kWh y aumentar la factura de la luz en unos 30 euros al año. Electrodomésticos que menos consumen en el hogar Cafetera: La cafetera es uno de los electrodomésticos con menor consumo de energía, ya que sólo consume alrededor de unos 25 kWh por año. Tostadora: Las tostadoras sólo consumen unos 30 kWh al año, lo que las convierte en uno de los electrodomésticos más eficientes del hogar. Microondas: Los hornos microondas consumen a partir de los 12 kWh para calentar un vaso de leche durante medio minuto. Esto los convierte en uno de los aparatos de cocina que menos energía consumen. Por ejemplo, asar 50 pollos en un microondas puede costar 7€. Frigorífico: El frigorífico es uno de los electrodomésticos de nuestro hogar que menos energía consume, con un consumo medio de unos 100 kWh al año. Sin embargo, si es antiguo, muy grande o incorpora funciones extra como generar cubitos de hielo, esta cifra puede aumentar considerablemente. Por otro lado, el frigorífico es uno de los electrodomésticos que más energía consume en modo de espera. Se calcula que gasta hasta 50 euros al año en electricidad, por lo que es importante desenchufarlo cuando no vayamos a utilizarlo durante largos periodos de tiempo, como por ejemplo durante las vacaciones si éstas van a durar más de una semana. Televisión: El televisor medio consume unos 150 kWh al año, la cual no es una cifra elevada. Sin embargo, es importante desenchufarlo por completo cuando no vayamos a verlo para ahorrar energía. Robot de cocina: El uso de los robots de cocina es uno de los métodos más cómodos para preparar la comida. Un robot de cocina consume unos 200 kWh al año y cuesta unos 40 euros en la factura de la luz. No obstante, si comparamos el consumo energético de un robot con el de una vitrocerámica, observamos que el robot es considerablemente más económico. Preguntas frecuentes ¿Qué consume más, el suelo radiante o la calefacción? La calefacción por suelo radiante es más eficiente y gasta menos energía que los sistemas de calefacción tradicionales. Calentar una habitación con calefacción por suelo radiante cuesta al hogar medio entre 25 y 35 euros al año, mientras que calentar la misma habitación con la calefacción central tradicional costaría entre 75 y 100 euros. Además, la calefacción por suelo radiante no crea corrientes de aire ni reseca el ambiente, haciendo que sea menos probable que cause problemas respiratorios. ¿Qué gasta más, un microondas o un horno? En general, el microondas produce un consumo de energía menor que el horno, no obstante, lo primero que tenemos que hacer es conocer el consumo energético de cada electrodoméstico. Para ello, podemos calcularlo mediante una fórmula que tiene en cuenta tres variables: La potencia en vatios, que indica cuánta electricidad necesita un aparato para funcionar y se corresponde con el número; el tiempo en horas, que es el tiempo que funciona cada día; y el precio de la electricidad por kWh, que nos dice cuánto cuesta hacer funcionar un electrodoméstico durante una hora. Una vez que tenemos estos datos, podemos comparar diferentes electrodomésticos para ver cuáles consumen más o menos energía. ¿Qué consume más, una bombilla led o una bombilla de bajo consumo? Las bombillas LED consumen menos energía y duran más que las bombillas incandescentes tradicionales, pero su adquisición puede resultar más cara. Si busca una forma de ahorrar en su factura de electricidad, sustituir sus viejas bombillas por bombillas LED es el mejor punto de partida. Las bombillas fluorescentes compactas también consumen menos energía que las bombillas tradicionales. Además de utilizar menos energía, las luces LED también son más duraderas que las bombillas incandescentes y las fluorescentes. Esto se debe a que utilizan un material semiconductor en lugar de un filamento como fuente de luz, lo que significa que una bombilla LED puede durar hasta 20 años antes de tener que ser sustituida. ¿Qué gasta más energía, el aire acondicionado o la estufa? La respuesta no es tan sencilla, ya que depende de cuánto los utilice, durante cuánto tiempo y en qué temporada. Como regla general, los electrodomésticos grandes y de gran potencia suelen ser los que más consumen, no obstante, en este caso la estufa sólo calentará una estancia mientras que el aire será capaz de calentar varias. ¿Qué es más cara, una estufa de butano o una estufa eléctrica? Puede utilizar su estufa de gas butano y aunque la deje encendida durante horas, su consumo de energía no va a ser elevado. Por el contrario, si conectamos un pequeño calentador eléctrico de 2000W de potencia, tras unos minutos de funcionamiento nuestra factura de la luz empezará a aumentar de forma notable. El consumo de una estufa eléctrica suele ser de unos 0,45 kWh por hora, mientras que el de una estufa de gas es de unos 0,15 kWh por hora. Así que la diferencia de precio entre ambas se multiplicará por el número de horas de uso al mes. Conclusión Hay muchas otras formas de ahorrar en la factura de la luz, como por ejemplo el uso de un termostato inteligente que pueda regular la temperatura de su casa según sus necesidades y horarios. Asimismo, también puede ayudarte a tener una aproximación más exacta de tu gasto el hecho de hacer un cálculo del consumo eléctrico de tu vivienda. Ahí tenéis los 10 aparatos que más electricidad consumen en nuestros hogares. Si realizamos algunos pequeños cambios en nuestros hábitos, como utilizar aparatos más eficientes y apagar los dispositivos cuando no se utilizan, podemos ahorrar un porcentaje en la factura.