Cerrar la compra de una casa no es algo que pueda hacerse de un día para otro. Conlleva una serie de procesos que deben cumplirse y que demoran inexorablemente la entrega de llaves. La operación puede dilatarse más en aquellos casos -la mayoría- en los que es necesario recurrir a un préstamo hipotecario. Por este motivo, una de las preguntas que más se hacen los compradores de vivienda es cuánto se tarda en firmar una hipoteca. Te lo contamos en las siguientes líneas, pero antes echa un vistazo a nuestro post de consejos antes de firmar una hipoteca. Calcula tu cuota con el simulador de hipotecas ¿Qué plazo hay para firmar una hipoteca? Como ya te contamos en nuestro otro artículo sobre cuánto tiempo tarda el banco en conceder una hipoteca, realmente la ley no marca un plazo para firmar la hipoteca. Es decir, desde el punto de vista normativo no hay nada estipulado sobre cuánto se puede tardar en firmar una hipoteca. Realmente, el plazo de tiempo depende de todos los agentes que participan en la firma de la hipoteca: banco, tasador (si el inmueble aún no ha sido tasado), comprador y notario. Por este motivo, y como principal interesado, es importante que agilices los procesos al máximo (presentando la documentación lo antes posible, etc.). Pese a esto, sí existen unos plazos aproximados que suelen darse en la mayoría de la firma de préstamos hipotecarios. Al margen del tiempo que destines a la búsqueda de ofertas en diferentes entidades bancarias (y que puede dilatarse tanto como tú desees), la respuesta a la pregunta de cuánto se tarda en firmar una hipoteca depende sobre todo de dos aspectos: Estudio de la concesión del préstamo hipotecario Una vez solicitado el préstamo, el banco estudia toda la documentación para determinar si el comprador cumple con los requisitos necesarios para obtener esa hipoteca (nivel de ingresos suficiente, capacidad de endeudamiento, etc.). La duración de este proceso, que es realizado por el departamento de gestión de riesgos de la entidad financiera, variará en función de varios aspectos: los plazos de trabajo estipulados por el banco, las características del solicitante (si es cliente habitual, si tiene mayor o menor solvencia económica, etc.) y el tipo de préstamo solicitado. Por lo general, el estudio y concesión del préstamo hipotecario suele tardar alrededor de unos 15 días, aunque en algunos casos puede llegar a extenderse hasta los dos meses. Numerosos expertos inmobiliarios recomiendan solicitar ofertas en varias entidades por si la elegida ralentiza en exceso la concesión del préstamo o incluso la rechaza. Por otro lado, realizar la tasación de la vivienda antes de la solicitud de la hipoteca puede agilizar el proceso hasta en dos semanas. Revisión y firma de la hipoteca Una vez aprobada la concesión del préstamo y con la oferta vinculante del banco en la mano es el momento de comprobar que todo está en orden. Tal y como establece la nueva ley hipotecaria, la entidad financiera debe enviar toda la documentación al notario elegido por el comprador para que compruebe que el préstamo cumple con la legalidad y no incluye cláusulas abusivas o confusas. El notario debe asegurarse, asimismo, de que el comprador entiende a la perfección el contrato. El solicitante del préstamo debe acudir a esta cita con el notario durante los diez días anteriores a la autorización y firma de la escritura pública del préstamo. El último paso es la firma ante notario, algo que puede tardar unas dos semanas. Nuevamente, tampoco hay unos plazos fijados por ley para la revisión y firma de la hipoteca. No obstante, puede decirse que en términos generales esta segunda fase del proceso suele demorarse en torno a unos 15 o 20 días. Obtención de las escrituras Tras la firma del préstamo y del resto de documentos oficiales solo queda recibir las escrituras de la vivienda, algo que puede tardar hasta tres meses. No obstante, ya habrás obtenido la financiación y cerrado la operación mucho antes (pese a no contar con los documentos oficiales en tu poder). ¿Cuánto se tarda en firmar una hipoteca, entonces? Como ya has visto, no hay unos plazos estipulados y depende de la disponibilidad y celeridad de todos los agentes que participan en la operación (comprador, banco y notario). No obstante, puede decirse que todo el proceso puede tardar en el mejor de los casos en torno a un mes y tres si se alarga.
