Una de las novedades que la ley hipotecaria ha incorporado como requisito para firmar una hipoteca es la exigencia del acta notarial. Este acta tiene que ser firmada por un notario después de comprobar que el banco ha entregado toda la documentación del préstamo hipotecario al cliente, que el contrato cumple con la ley (no incluye cláusulas abusivas en la hipoteca, etc.) y que es comprendido en su totalidad por el comprador. Por este motivo, todos los solicitantes de una hipoteca deben ir al notario obligatoriamente antes de firmar la escritura. Con anterioridad a la entrada en vigor de esta ley, el cliente también podía ir a la notaría antes de firmar la escritura para recibir asesoramiento, pero no era una exigencia legal y poca gente lo hacía. Ahora es obligatorio para reforzar la seguridad jurídica del cliente. Aquí tienes motivos por los que necesitas a un notario para comprar tu vivienda nueva. ¿Qué debe comprobar el notario en un préstamo hipotecario? Antes de continuar, lo primero que debes saber es quién elige al notario. La respuesta es la persona que solicita la hipoteca. Por otro lado, y con el fin de evitar los problemas generados durante los últimos años por las cláusulas de las hipotecas que han sido consideradas abusivas por los tribunales (cláusulas suelo,etc.), la ley hipotecaria ha establecido un mayor control de la información que el banco debe entregar al cliente antes de firmar la escritura. A su vez, ha reforzado el papel del notario en el proceso: ahora no solo participa en el acto de firma, sino que previamente tiene que validar que no existe ninguna cláusula abusiva y que el cliente ha entendido bien todos los términos del préstamo. Así, en los diez días anteriores a la firma de la hipoteca, el banco debe remitir toda la documentación al notario a través de la plataforma notarial, es decir por medios telemáticos, y al propio cliente. Estos documentos son: La FEIN (Ficha Europea de Información Normalizada) con la información detallada de su hipoteca. La FIAE (Ficha de Advertencias Estandarizadas), que informa sobre las cláusulas más complejas del préstamo. Una copia del contrato. Una simulación de las cuotas en diferentes escenarios según la evolución de los tipos de interés de la hipoteca (si es variable). Quién paga los gastos de hipoteca y cuáles son. En realidad, ahora todos los gastos de notaría, registro y gestoría corresponden al banco, así como el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados. El cliente solo tiene que pagar la tasación de la vivienda. Las copias del documento las paga quien las solicita. Durante su reunión con el notario, el comprador puede consultar todas sus dudas. Posteriormente, este emitirá el acta notarial tras comprobar que el cliente ha recibido toda la documentación y la entiende perfectamente. El acta notarial es gratuita para el hipotecado. ¿Qué errores puede detectar el notario en la documentación de la hipoteca? Los errores que puede detectar generalmente se refieren a omisiones (falta de algún documento) o erratas en los documentos. Tal y como explican Notarios en la red, todos ellos tienen que ser subsanados por la entidad financiera que ha remitido la información. Cuando el notario detecta algún fallo en la documentación, lo primero que debe hacer es comunicárselo al banco para que lo corrija, ya que hasta entonces no podrá emitir el acta notarial. Una vez que han sido corregidos en la escritura los fallos detectados por el notario, comienza a contar de nuevo el plazo de diez días que tienen prestamista y prestatario para firmar la hipoteca. Además, antes de firmar la escritura, el cliente debe ir de nuevo a la notaría para que se pueda emitir el acta notarial positiva. No obstante, los notarios reconocen que durante los primeros meses tras la entrada en vigor de la ley hipotecaria era más frecuente que se produjeran errores por despiste o por defectos en la información facilitada por el banco. Sin embargo, ahora tras el rodaje de estos meses se ha notado una reducción en este tipo de incidencias. También puede ser que cuando el cliente visita al notario para recibir asesoramiento sobre su hipoteca descubra que no está de acuerdo con alguna condición del préstamo. En ese caso tampoco se puede emitir el acta notarial. El cliente deberá ir de nuevo al banco para renegociar las condiciones. Después se repetirá todo el proceso de remitir de nuevo la documentación a la notaría para su comprobación. En cualquier caso, el notario no puede emitir el acta notarial, que es un requisito indispensable para firmar la escritura, si detecta algún error y el banco no lo corrige. Es indispensable para firmar el acta notarial positiva que toda la documentación facilitada por el banco al cliente esté correcta, que el cliente la haya podido consultar y que haya recibido el conveniente asesoramiento por parte del notario. También que entienda lo que va a firmar. Una vez subsanados los errores y con el acta notarial positiva, el siguiente paso es la firma de la escritura de la hipoteca en el notario con la presencia del cliente y el representante del banco.