Casas de lujo a la venta

Cómo es vivir en una casa de lujo

• Exclusividad. Como ya hemos dicho, si hay un rasgo especialmente distintivo en estas viviendas, ese es la exclusividad. Una exclusividad que empieza por su precio (estos inmuebles pueden costar varios millones de euros) y que continúa con todas la delicatessen que ofrecen a sus moradores: lujosas y espaciosas estancias destinadas a hacer la vida más sencilla y glamourosa (habitaciones con baño incorporado en todos los casos, vestidores, gigantescas cocinas con isla, gimnasio, despacho, sala de juegos, etc.). Las casas de lujo van un paso más allá y ofrecen cosas que las viviendas normales solo anhelan...
• Diseño. De poco sirve contar con una casa gigantesca o en un lugar privilegiado si el envoltorio no acompaña... Las verdaderas casas de lujo no solo son espaciosas, también elegantes. Cuentan con materiales nobles, mobiliario exclusivo y los mejores acabados. De hecho, es frecuente que hayan sido decoradas por especialistas e incluso reputadas firmas.
• Confort. Un buen diseño debe ser bonito, pero también confortable. Por eso, las viviendas de alto standing no solo apuestan por el lujo en su máxima expresión, también por el máximo confort de sus ocupantes. Incorporan todo tipo de instalaciones y comodidades destinadas a hacer más fácil el día a día de sus propietarios: domótica o tecnologías de última generación, cómodos salones, espaciosas cocinas, amplias habitaciones, prácticos vestidores, bonitos jardines con piscina, buena eficiencia energética... También es frecuente que dispongan de una zona para invitados, de tal forma que mantengan su privacidad. Y es que cualquier capricho es bueno en estos inmuebles al alcance de muy pocos presupuestos.
• Seguridad. Por último, una casa de lujo también debe ser segura. Tanto si se encuentra en una urbanización como en un edificio, es importante que cuente con una buena instalación (alarma, cámaras, etc.) que garantice la seguridad de sus ocupantes.

Consejos para comprar una casa de lujo

• Presupuesto. Aunque solo sea aproximado, es imprescindible calcular el presupuesto que quieres destinar a la compra, ya que será un primer filtro a la hora de buscar propiedades.
• Vivienda habitual o segunda residencia. No es lo mismo utilizar una casa de lujo como vivienda habitual o como segunda residencia, ya que las necesidades pueden no ser las mismas (distribución del inmueble, etc.). Por ejemplo, en una casa de vacaciones harás mucha más vida en el exterior que en una primera residencia. Por este motivo, es crucial que a la hora de analizar las necesidades de tu próxima adquisición tengas en cuenta si vivirás en ella de forma permanente o no.
  
  
  
  
  
• Tipo de vivienda y ubicación. Define el tipo de vivienda que buscas (chalet individual, ático, etc.) y su ubicación (zona céntrica, urbanización en las afueras, etc.) para acotar mejor la búsqueda. De todos modos, no seas excluyente: nunca se sabe dónde puedes encontrar la casa de tus sueños.
• Entorno. Confirma que el entorno de la casa de lujo que estás a punto de comprar reúne todos los requisitos que necesitas: ¿hay cerca un colegio de calidad para los niños? ¿Centros comerciales? ¿Ofrece la zona suficiente seguridad? ¿Es tranquila pero está demasiado alejada de todo?
• Personalización. Si detectas algo que no te convence (distribución, equipamiento, domótica, jardín, seguridad, etc.), plantea al promotor la posibilidad de realizar alguna modificación a la vivienda para que se adapte a tus preferencias.
• Gastos de mantenimiento. Aunque el dinero no suele ser un problema para los propietarios de este tipo de inmuebles, no está de más tener en cuenta todos los gastos que acarrea su propiedad (que no son pocos).