El precio medio de la vivienda terminada (nueva y usada) en España ha experimentado una caída del 1,1% con respecto a marzo, mes en el que empezó el estado de alarma descretado por las crisis sanitaria. Según apunta Tinsa, el índice general de la estadística IMIE General y Grandes Mercados se situó en junio en 1.527 puntos, lo que supone una caída del 1,1% con respecto al nivel del pasado mes de marzo. No obstante, el índice del mercado inmobiliario español mantiene un crecimiento del 1,5% en tasa interanual. Según Rafael Gil, director del Servicio de Estudios de Tinsa, el índice muestra en junio “el primer ajuste generalizado de valores, con descensos respecto a marzo en todos los grupos geográficos” después de dos meses sin cambios significativos ante el confinamiento de la población y en los que se frenó la actividad económica. El precio bajó menos en capitales y grandes ciudades Estos primeros datos sobre el mercado inmobiliario tras el impacto de la COVID-19 señalan que las capitales y las grandes ciudades en general son las que han registrado una menor variación de precios en el periodo comprendido entre marzo y junio de 2020 (-0,2%). Diferente ha sido el comportamiento en otros mercados más dependientes de la demanda extranjera, como la costa mediterránea (-3,8%) y el grupo insular formado por Baleares y Canarias (-2,4%). Las áreas metropolitanas se han mantenido en el entorno de la media nacional, con un descenso del 1,3% desde el mes en que se inició el estado de alarma. En los municipios del interior agrupados en ‘Resto de municipios’, el ajuste ha sido también moderado, con un descenso del 0,6% desde marzo. No obstante, y a pesar de este ligero ajuste, todavía se observan crecimientos en tasa interanual en la mayoría de los grupos geográficos. Por ejemplo, las islas muestran la mayor diferencia al alza respecto al mismo mes de 2019, con un aumento del 5,4%, seguidas de las capitales y grandes ciudades (2,4% interanual) y del grupo ‘Resto de municipios’, con un 1,3%. Las áreas metropolitanas y la costa mediterránea muestran precios medios inferiores a los de un año antes: un 1,1% y un 0,3% interanual, respectivamente. Los precios se mantienen un 16,6% por encima de los mínimos de 2015 El sector sigue mostrando una buena salud, tal y como demuestra el hecho de que el precio medio de la vivienda en España esté un 16,6% por encima del mínimo registrado en febrero de 2015, alcanzándose revalorizaciones más intensas en las islas (un 33,1% más que su mínimo en la crisis motivada por la burbuja inmobiliaria) y en las capitales y grandes ciudades, donde el precio está un 25,9% por encima de los mínimos históricos. Por el contrario, las localidades de interior (‘Resto de municipios’) se encuentran aún en una fase inicial de recuperación de la crisis precedente, con un crecimiento medio del 5,6% desde sus mínimos. Si se analizan los datos desde los máximos de 2007, las cifras reflejan que el precio medio en la costa mediterránea registra todavía una caída acumulada del 43%, muy por encima del 33,1% de la media nacional. También es significativa la brecha en las áreas metropolitanas (-39,1%), mientras que en las islas el descenso acumulado desde máximos se reduce al 14,3%. Los visados de obra nueva cayeron un 36% durante el confinamiento El índice Tinsa se calcula a partir de las tasaciones de vivienda terminada (nueva y usada) y se entiende mejor si se valoran otros datos inmobiliarios de ese periodo en cuestión. Por ejemplo, según los datos del INE, en abril de 2020 se produjeron 25.042 compraventas de viviendas en España frente a las 34.806 del mes de marzo. Esto implica que el confinamiento provocó un descenso del 38%. Otro dato interesante que afecta a la obra nueva es la cifra de visados que emite el Colegio de Aparejadores. En el mes de abril sólo se emitieron 3.872 visados de obra nueva frente a los 6.095 de marzo, un 36% menos, lo que es consecuencia del cese de la actividad económica. También resulta interesante mirar la oferta en los portales inmobiliarios que recoge el informe de Tinsa. En este caso, el dato es trimestral y muestra 786.970 viviendas publicadas en el segundo trimestre de este año frente a las 807.939 viviendas del primero. Por lo tanto, no hubo un descenso pronunciado en el número de viviendas en oferta durante lo peor de la pandemia. Por último, la estadística de hipotecas es reveladora por cuanto que en el mes de abril se concedieron 23.840 préstamos hipotecarios en España frente a los 26.382 de marzo, lo que indica que las operaciones financieras en curso no se detuvieron a pesar de la situación de confinamiento.
