Revisiones necesarias en un piso antes de ponerlo en alquiler

En España hay 4,2 millones de viviendas en alquiler de las que la mayor parte, más del 80%, está en manos de particulares, según un informe de Savills Aguirre Newman. Sin embargo, la oferta de vivienda en alquiler es escasa para cubrir la demanda que ha aumentado en los últimos años. Se calcula que se necesitan 1,8 millones de viviendas en alquiler para satisfacer la demanda. 

Poner una vivienda en alquiler es una forma de inversión de los particulares arraigada en España, que crece cuando baja la rentabilidad de otras formas de inversión como la Bolsa. Si eres un propietario particular que quiere poner en alquiler una vivienda debes tener en cuenta estas revisiones antes de alquilar la casa.

Revisa las instalaciones de la vivienda 

Los inquilinos cuando visitan la vivienda revisan que todo está en perfecto estado porque si detectan algún fallo, no la alquilan. Por esta razón la primera acción que debes realizar antes de poner la vivienda en alquiler es comprobar que funcionan bien las instalaciones de luz, agua, gas y calefacción. Ten en cuenta que las averías que se produzcan en la vivienda con posterioridad son responsabilidad del propietario. 

También conviene que cuando se alquile la vivienda cambies la titularidad de los suministros para que, en caso de impago el inquilino, sea el responsable de la deuda. 

Realiza las mejoras necesarias en el piso 

Si la casa que quieres poner en alquiler tiene unos años debes realizar algunas reformas para mejorar su habitabilidad. Reformar la cocina y los baños para actualizarlos es una buena inversión porque son las estancias en las que más se fijan los inquilinos. También es conveniente repasar los suelos y pintar las paredes porque estos cambios mejoran el aspecto de la vivienda y dan la sensación de limpieza. 

Valora mejorar la accesibilidad 

Puedes realizar obras en la vivienda para convertirla en una vivienda adaptada en la que puedan vivir personas con discapacidad que se desplazan en silla de ruedas. Debes tener en cuenta que la silla de ruedas necesita una anchura mayor en las puertas y pasillos para entrar sin dificultad. Además, debes preparar un baño adaptado. Con estas mejoras en la accesibilidad, amplías la posibilidad de alquilar la vivienda a un mayor número de inquilinos. 

Despersonaliza la casa y crea un ambiente agradable 

Dentro de las revisiones que debes realizar antes de poner en alquiler la casa no debes olvidar el mobiliario. Generalmente un piso vacío cuesta más tiempo alquilarlo, pero tampoco debes colocar cualquier mueble para cubrir los espacios. Es aconsejable que elijas muebles funcionales que puedan adaptarse a cualquier tipo de inquilino y, sobre todo, elimina todos los elementos personales de la casa porque es fácil que tus gustos no coincidan con los gustos de los inquilinos. 



En cuanto a la ventilación debes tener la precaución de que la vivienda esté aireada cuando la visitan los inquilinos. Puedes evitar el olor a cerrado de la vivienda poniendo un ambientador suave que genere un aroma agradable y sensación de hogar. 

Consulta y cumple la normativa 

Además de las revisiones del piso, debes consultar la normativa que regula el alquiler de vivienda para evitar problemas legales. Consulta la Ley de Arrendamientos Urbanos para saber las normas que rigen el alquiler que son de obligado cumplimiento, entre las que destaca la duración del contrato, el pago de la renta, el plazo y forma de pago, la fianza y las razones por las que se puede extinguir el contrato de alquiler. 

Ten preparados los documentos necesarios para alquilar la vivienda que son la cédula de habitabilidad, el certificado de eficiencia energética, la escritura de la vivienda o una nota simple del registro que certifique que eres el propietario de la vivienda y la licencia de primera ocupación si es una vivienda nueva o reformada. Responde a todas las dudas que tengan los inquilinos de forma clara en cuanto a la renta y los gastos que corresponden al inquilino. 

Redacta el contrato adecuado 

El contrato de alquiler es el documento que recoge las pactos que establecen propietario e inquilino, con los derechos y obligaciones de cada parte. Es importante que el contrato no contenga cláusulas abusivas por lo que conviene contar con el asesoramiento de un abogado especializado en temas inmobiliarios para redactar el contrato. 

No existe un modelo fijo de contrato de alquiler, es decir, que las cláusulas se pactan libremente entre las partes, pero deben cumplir las condiciones de obligado cumplimiento fijadas en la LAU. 

Elige al inquilino apropiado

Igual que el inquilino revisa la vivienda antes de alquilarla para ver si cumple sus requisitos, como propietario también puedes elegir al inquilino. Si quieres evitar sorpresas como impago del alquiler, debes comprobar la solvencia del inquilino, para lo que cuentas con el Fichero de Inquilinos Morosos, en el que puedes comprobar si el inquilino tiene deudas de alquiler. También existen otros registros de morosos para verificar si tiene otras deudas. 

Asimismo debes pedir unos documentos al inquilino que certifiquen su solvencia como últimas nóminas si es un trabajador asalariado y la declaración del IVA e IRPF si es autónomo. 

Por último, no olvides cuando pones en alquiler una vivienda mantener una buena relación con el inquilino porque si está satisfecho no querrá dejar la vivienda y, de esta forma, consigues un alquiler estable durante más tiempo. Eso supone ser eficaz a la hora de resolver los problemas que plantean los inquilinos y solucionar con rapidez las averías cuando se produzcan.