El coronavirus podría causar no solo una bajada en el precio de la vivienda, también cambios en los hábitos de compra de los españoles. Después de las semanas que hemos pasado en confinamiento, todos hemos percibido meridianamente aspectos de nuestras casas que antes no nos eran tan relevantes, pero que ahora pueden cobrar un peso muy importante a la hora de elegir una nueva. No en vano, y aún sin terminar este confinamiento, las autoridades nos advierten de que podría haber otro en otoño si la crisis vuelve a repuntar. Ante el temor a esta posibilidad y aprendiendo de lo vivido (espacios reducidos, ausencia de terraza o jardín, etc.), los compradores podrían estar cambiando sus preferencias a la hora de buscar un nuevo hogar. Son las nuevas tendencias detectadas en las búsquedas realizadas en muchos portales inmobiliarios. Solo se trata de una demanda distinta a la previa al COVID-19 y puede que no se materialice, pero los compradores potenciales parecen mostrarse más favorables hacia ciertos tipos de vivienda. Por ejemplo, en las mesas redondas de SIRA (Spanish International Realty Alliance) ya se habla de nuevas preferencias de vivienda. El confinamiento habría puesto en valor la luz natural, espacios más amplios, mejores vistas, terrazas, balcones o zonas ajardinadas. Por si no sabes cómo hacerlo, aquí tienes algunos consejos para comprar vivienda pese al coronavirus. ¿Ha dejado el confinamiento en evidencia algunas viviendas? De este modo, las semanas encerrados en casa han puesto en evidencia la falta de ventilación, luz natural, salubridad, accesibilidad y confort de muchas viviendas en España. Antes de esta crisis no pasábamos tanto tiempo en casa, por lo que no valorábamos ciertos aspectos que ahora han ganado importancia. Por este motivo, no es descabellado pensar que los nuevos compradores de viviendas podrían buscar inmuebles en los que prime la luz natural, la ventilación, la distribución, las vistas y las zonas exteriores privadas. Todo esto podría traducirse en una mayor demanda de terrazas, áticos, azoteas, balcones o viviendas con jardín. Nuevas tendencias en el mercado de la vivienda Aunque de momento son solo suposiciones basadas en las nuevas búsquedas de los potenciales compradores en los portales inmobilarios, las viviendas más codiciadas ahora parecen ser las que cuentan con habitaciones más grandes y espacios al aire libre (terrazas, jardines, etc.). Por lo que parece, el confinamiento ha hecho que las personas busquen ahora hogares en los que puedan sentirse menos encerrados y más libres, además de contar con más espacio para teletrabajar o realizar tareas como cocinar o incluso hacer deporte (estas son las zonas preferidas de la casa para pasar el confinamiento por coronavirus). La búsqueda de viviendas en las afueras de las grandes ciudades es otra de las tendencias detectadas en los últimas semanas por los expertos inmobiliarios. Según ellos, tras la experiencia del confinamiento, muchos españoles se han dado cuenta de que prefieren una zona menos céntrica a cambio de más metros cuadrados, mayor luminosidad o espacios abiertos. Todas estas nuevas demandas podrían traducirse en un cambio en la mentalidad de ciertos compradores que antes sólo buscaban el centro de las ciudades y que ahora preguntan por localidades más pequeñas del extrarradio donde sí se pueden encontrar inmuebles que reúnen estas nuevas necesidades. Así, algunos expertos creen que la mayor demanda de información sobre viviendas unifamiliares que se está produciendo en las últimas semanas -son las que mejor cumplen con todas estas nuevas peticiones- podría traducirse tras la crisis del coronavirus en un incremento de las ventas de este tipo de inmuebles. Las viviendas que pueden salir fortalecidas tras el COVID-19 Según el estudio de Property Buyers by SomRIE, los compradores muestran actualmente más interés por las propiedades con terraza, jardín, balcón o buenas vistas, las ubicadas cerca de grandes capitales y/o en zonas prime. En resumen, los inmuebles que podrían revalorizarse en las próximas semanas son: Viviendas más volcadas al exterior. Dada la mala experiencia del confinamiento, los compradores buscan viviendas más abiertas al exterior y pensadas para pasar más tiempo dentro. Podría bajar la demanda de pisos bajos o interiores y subir la de exteriores, con balcones, terrazas, buenas vistas o jardines Se amplía la búsqueda a la periferia. Dado que el centro de las ciudades tiene una oferta muy limitada y no puede ofrecer todo lo que podría demandarse a partir de ahora, algunos compradores estarían dispuestos a salir a barrios bien comunicados de la periferia e incluso llegar a capitales de provincia distintas a donde se trabaja para conseguir más espacio por el mismo dinero o menos. En este sentido, muchos expertos del sector inmobiliario apuntan hacia el teletrabajo como motor de ciertos cambios en la demanda de vivienda, ya que esperan que esta tendencia laboral haya llegado para quedarse y permita que los compradores pongan en valor aspectos que les permitan disfrutar más de su vivienda ahora que podrán pasar más tiempo en ella. Apartamentos muy bien situados. En lo que respecta a la compra de vivienda para su posterior alquiler, los expertos consideran que habrá mayor demanda de las casas que mejor respondan a las nuevas peticiones de los clientes. Los apartamentos en zonas céntricas es una de las tipologías que puede salir reforzada tras la crisis motivada por el coronavirus. De momento, se trata de tendencias en las búsquedas o consultas y no de una demanda real, ya que el mercado residencial está comenzando a despertarse estos días... No obstante, parece claro que las nuevas preferencias de algunos clientes podrían acabar motivando cambios importantes en la demanda de viviendas en los próximos tiempos.