Las últimas herramientas proptech presentes en la obra nueva

Con el paso de los años, el sector inmobiliario español se ha ido modernizando hasta que finalmente la llegada de las proptech ha marcado un punto de inflexión. En el último tramo de los años 90 empezaron a florecer en este país las primeras start-ups inmobiliarias, empresas que apostaron por el desarrollo tecnológico para cambiar la manera de consumir, comunicarse y hacer negocios en el mercado inmobiliario.

Todo esto ha hecho posible que actualmente el mercado de obra nueva se haya podido beneficiar de estos últimos avances digitales.

 ¿Qué son las proptech?

Tal y como explica la Wikipedia, las proptech son "un grupo de start-ups que usan tecnologías disruptivas para cambiar la forma en cómo los diferentes actores del mercado (compradores, vendedores, inversionistas, inmobiliarias, constructores, propietarios inmobiliarios) hacen negocios, cambiando la forma de construir, diseñar propiedades, vender, arrendar y administrar inmuebles".

Según el barómetro de transformación digital e innovación del sector inmobiliario lanzado por las consultoras Finnovating y Spanish PropTech, las start-ups que se dedican a esta industria han crecido un 69 % en el último año.

Así pues, las proptech que intervienen en el mercado inmobiliario pretenden, entre otros objetivos, convertir los procesos de búsqueda, inversión y compra en una experiencia sencilla, rápida y eficaz. De esta manera y gracias a sus aportaciones, agregan un valor añadido al sector de la vivienda y han transformado la forma de comprar una vivienda.

Herramientas más utilizadas por las proptech

Estas las herramientas más utilizadas por estas start-ups del mercado inmobiliario destacan las siguientes:

Portales inmobiliarios

Los portales inmobiliarios son una de las soluciones más populares y conocidas dentro del ámbito proptech. Se trata de plataformas dedicadas a la compraventa y alquiler que cuentan con una amplio catálogo de viviendas de obra nueva y usadas. Además, estos sites facilitan el contacto instantáneo entre compradores y profesionales y en muchas ocasiones ofrecen al usuario información y valiosos consejos de compra.

Sin duda, estos portales se han convertido en los últimos años en el mejor escaparate del mercado inmobiliario y en la forma más rápida y barata de acceder a miles de propiedades de todo tipo. Promotoras, agencias y particulares publican en ellos sus propiedades para llegar a su público objetivo.

Agregadores

Los agregadores inmobiliarios son buscadoresque reúnen el contenido de distintos portales y páginas web. Son plataformas que, en lugar de albergar su propia cartera de inmuebles, acaparan las publicaciones de viviendas de otros sitios web. Concentran en un mismo lugar una enorme cantidad de anuncios concentrando un gran volumen de oferta.

Crowdfunding inmobiliario

Esta herramienta nacida en la era del proptech permite que diferentes personas hagan aportaciones económicas para participar en algún proyecto inmobiliario y obtener posteriormente un rédito. Estos proyectos consisten en comprar inmuebles, reformarlos en muchos casos, y venderlos o alquilarlos más tarde para obtener una ganancia. Las empresas especializadas en este tipo de crowdfunding inmobiliario se encargan de estudiar, analizar y gestionar todas estas contribuciones económicas.

La ventaja de invertir en bienes inmobiliarios de esta forma es que no exige mucho capital, por lo que es el inversor el que decide el riesgo que está dispuesto a asumir con su mayor o menor aportación.

Realidad virtual

Las promotoras saben valerse del poder de esta herramienta para organizar tours virtuales a través de las viviendas incluso antes de que éstas estén construidas. Así, los clientes pueden ver cómo son o serán los espacios de la casa en la que está interesado, ver cómo quedan diferentes acabados, etc. Todo ello sin necesidad de desplazarse a ningún sitio y desde el sofá de su casa. Una herramienta mucho más realista e impactante que las tradicionales galerías fotográficas.



Y por si fuese poco, la realidad virtual también brinda la posibilidad de optimizar el homestaging. De esta forma, el interesado podrá comprobar cómo quedaría su casa amueblada según distintos tipos de mobiliario.

Big data

El sector de la vivienda también se beneficia del análisis del big data, ese almacenamiento masivo de datos que numerosas empresas inspeccionan con detenimiento para conocer el comportamiento del consumidor. Si las empresas del sector inmobiliario conocen el perfil de su posible comprador, valorando aspectos cómo qué tipo de inmueble desea y en qué zona lo busca, serán capaces de tomar decisiones eficaces y de diseñar estrategias de negocio más acertadas. El big data ha encontrado su hueco en este nicho de mercado.

Domótica

En los pisos de obra nueva resulta más sencilla la instalación de sistemas de domótica. ¿Pero, qué significa ese concepto? La domótica viene a ser la automatización y control de determinados sistemas que conforman una vivienda. Pueden considerarse como parte de la domótica aquellos aparatos electrónicos que nos facilitan la vida diaria: termostatos que regulan la temperatura del hogar en función del frío o calor, alarmas que se activan solas cuando alguien se encuentra muy próximo a nuestra puerta, encendido y apagado de luces a distancia…

CRM Inmobiliario

Esta herramienta es una de las más explotadas a día de hoy por los profesionales del sector. Un CRM Inmobiliario es un software que proporciona un inventario minucioso sobre todas las propiedades y/o clientes que tiene la empresa. Gracias a él pueden realizarse múltiples tareas muy útiles en el día a día: estadísticas, informes, sistema de búsqueda, gestión de contactos, control de procesos de venta… Las empresas que desarrollan estas aplicaciones ofrecen estos productos para que los profesionales del gremio administren sus activos del modo más eficiente.

Construcción industrializada

La construcción industrializada es una técnica que, poco a poco, va abriéndose paso en la industria inmobiliaria. A diferencia de la construcción tradicional, consiste en construir en un taller o fábrica alguno de los elementos constructivos (fachadas, etc.) e incorporarlos posteriormente al edificio.

La elaboración de estos componentes de la vivienda se realiza de manera mecanizada mediante el uso de tecnologías avanzadas que participan en su diseño y producción. Una vez concluida la fabricación de estos elementos, estos son transportados a la ubicación correspondientes para su posterior ensamblaje.

A modo de resumen, en este reportaje hemos visto cómo influyen las nuevas tecnologías en la obra nueva. En primer lugar, los portales inmobiliarios ofrecen multitud de propiedades de forma rápida y sencilla. Por otro lado, el crowdfunding se está consolidando como una nueva forma de invertir -menos arriesgada- en bienes inmuebles, mientras que la construcción industrializada está ganando peso en el sector y simplificando todo el proceso constructivo. Finalmente, el big data, la realidad virtual y el CRM son herramientas que promotoras y empresas especializadas utilizan para llegar al cliente de una forma más efectiva y gestionar mejor toda la información que manejan en el día a día.